Dios contigo.

Miré el cielo
Y éste se encontraba gris;
Parecía caer una tormenta
Y mi ser roto temblaba.

Deseé gritar, correr,
Quedarme inerte o escapar,
La luz, el viento,
Todo me hacía daño.

Sentía ahogarme
Ante el correr del tiempo,
Y la incertidumbre...
Tal vez tuve tuve miedo.

Mas, sin embargo recé,
Y mi súplica llega a Dios
Porque ésta oscuridad
Pronto desaparecerá.

Mi angustia y desesperación
Pronto tendrán claridad,
Y mi miedo es un ciclón
Que al fin se desvanecerá.

Porque todo este amor
Que llevo en mí tan dentro;
Y mi fe que es inaudita
Aliviará pronto mi deseo.



Derechos Reservados 1993-2024 © Letyalegria®