Continuamos.....
Para: Gustavo A.M.

Hay una línea en el tiempo que se camina para descubrir, la luz que todos llevamos dentro.

Mi línea, mi camino empezó contigo, en un beso, mi primer beso, ese que marcó la esencia, la huella enorme, que de alguna forma me guiaría de nuevo a ti...

La adolescencia me descubrió en tu abrazo, en el sentimiento que se forjó desde mis adentros, en la caricia sutil que hace una tormenta desde los huesos, tal vez fué poco tiempo, mas en mis recuerdos, tu ser se quedó prendido a mí.

Después de eso pasaron 35 años... y un día volviste a mí.
Al escuchar tu voz en aquella llamada, se me vivnieron de golpe, los años de amor a tu lado, con los sentimientos más puros, con el sol en la piel y la sonrisa en los labios, con tus ojos chispeantes y con los míos llenitos de ti.
Nunca pasó el tiempo, volvimos a recordarnos en la magia de la ansiedad que había quedado en pausa, en la espera de sentir de nuevo, un amor infantil que de pronto se volvió maduro.
Han sido largas llamadas de reconocimiento, quizás también para saber más de nosotros, incluso para valorar cualidades y defectos.

Y llegó el momento en que el encuentro físico se habría de dar...
El temblor del cuerpo prevalecía en ambos, pensar que si sería igual que antes.... pensar que si ó no funcionaría...
Los temores no, no cabían, tan solo la vibración del sonido nuestro se escuchaba.
Nos reconocimos al instante, aún con los cambios inevitables que hace el tiempo..
Nos fundimos en un abrazo, cálido, fuerte, lleno de antes y de hoy.
Y el beso tierno que marcó un nuevo momento entre los dos..
Hemos vivido una semana de amor, de luz, de pasión, de fuego, ternura, recuerdos... que más?... qué se yo!.
Sin embargo solo fué un momento mas entre tú y yo...

Y quedó entre recuerdos una vez más ese amor....

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