Olvidarte.

Late el sol en mi piel, siento vibrar mis entrañas ante el recuerdo hermoso de saber que algún día fuiste mío...

Pero solo son los recuerdos, las cenizas que aún conservan algún carbón ardiente que no apagó el viento de tu desdén y que solo vive gracias a los sentimientos que afloran vertiginosos, añorando la gracia de tu mirada, el sabor ardiente de tus labios, tus manos sedientas que hace tiempo me tocaban.

A veces quiero revivir todo esto y marco tu teléfono esperando escuchar tu alegría al contestarme, esa que brotaba con ansiedad cuando buscabas citarme, pero no hay vestigios en tu voz, quizás olvidaste hasta mi forma....

La impotencia entonces me recorre haciendo temblar mi ser, entonces no siento nada, las lágrimas se vuelcan sobre mi rostro y atrapada, desnuda ante el dolor, mi ser grita tu nombre, diciéndote adiós una vez más, pidiendo a Dios olvidarte.

Pero qué sabes tu de amar?, cuando lo único que haces es recibir....

Me quedo con los vestigios de mi alma, haciendo que el néctar de lo que para mi fué amor, por lo menos quede guardado en la luz de un rayo de sol.

Derechos Reservados 1993-2024 © Letyalegria®