
Dios contigo.
Miré el cielo
Y éste se encontraba gris;
Parecía caer una tormenta
Y mi ser roto temblaba.
Deseé gritar, correr,
Quedarme inerte o escapar,
La luz, el viento,
Todo me hacía daño.
Sentía ahogarme
Ante el correr del tiempo,
Y la incertidumbre...
Tal vez tuve tuve miedo.
Mas, sin embargo recé,
Y mi súplica llega a Dios
Porque ésta oscuridad
Pronto desaparecerá.
Mi angustia y desesperación
Pronto tendrán claridad,
Y mi miedo es un ciclón
Que al fin se desvanecerá.
Porque todo este amor
Que llevo en mí tan dentro;
Y mi fe que es inaudita
Aliviará pronto mi deseo.
Derechos Reservados 1993-2025 © Letyalegria®